Ella era una buena moza, Catalina se llamaba
Era muy alegre y siempre se la oía cantar :
"Me casó mi madre, chiquita y bonita
Chiquita y bonita
Con un muchacho que yo no quería
Que yono quería".
Una noche, ella le dijo a su amado
Que si quería sexo
Debía de hacer una poesía
En que entrasen losnombres de los dos
E hizo esta :
"Catalina, m amada, delante vas tú a la cama
Ahora yo, Pedro, voy detrás y te la meto".
Ella era una calabaza hueca
Y él una calabaza de pájaro de cuenta
Pero se querían y retozaban
De un término aotro
De Cuéllar a Segovia.
Eran felices, comían perdices
Y como dos amantes ejemplares
Se arrascabancon gana
En los pinares de El Henar.
Pero, un día, que ella, resfriada
Dejó el trabajo para venir a casa
Y meterse en la cama
Por la fiebre que tenía
Encontró a su marido con un querido
Ambos haciendo cuentas de cerdos
Escuchándole a él decir alotro :
"Al fin y al cabo
Logré meter en tu jaula mi jilguero".
Se me enturbiaron los ojos
Se me hirió el sentimiento
Y, triste y afligida
Pero con muy mala leche
Abrí la puerta de la casa
Gritándoles a los dos :
- ¡Fuera¡ puercos.
Ya no soy tu mujer y ni tú mi querido esposo
Agarrando una silla para romperle las costillas.
Al ruido, salieron unas vecinas
Preguntando :
- ¿Qué es loque pasa, Catalina ?
- Nada, que no tenía ni idea
De que estaba casada con un maricón
Que come cola de carnero.