Después de haber concelebrado misa
Yo como monaguillo
Para las Monjas de Sion
Las hermanitas con seis reales
Nos pagaron las hostias consagradas
Invitándonos a comer "arroz con alguna tajada"
A lo que respondimos :- No, gracias
Regresando en Amor de Clerecía
A Carboneras de Guadazón, en Cuenca
Llevandocada uno de nosotros dos
Nuestro propio libro de Amor
Con una dedicatoria a cada cual que decía
¡Qué casualidad¡
"… si tienes novio despréciale por mi
Que no hay nadie a quien yo quiera
Más que a ti."
Llegamos a Carboneras
Como amantes criados en Madrid.
En la estación de tren nos esperaban
Mejor dicho le esperaban a él
Mujeres beatas con oficio de ingenieras
La mayor parte de ellas separadas
De su maridos
Pues se habían ido para La Habana.
A él le dijeron de mí :
- Qué joven tan guapo
Dándole un real deplata
Diciéndole una mujer con sentimiento :
- Perdone, luego usted pase por casa
Y traiga consigo
A este joven tan bello
A ver si le caso con mi Lola
Que no quiero que se quede para vestir santos.
Nos miramos él y yo, su amor
Él le dijo : -Si, señora.
Cogidos de la mano nos fuimos
A la casa del cura
Por toda Cuenca nombrado.