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El concepto
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 Article publié le 27 mars 2016.

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Sobre la "Creatividad", Los "Conceptos", La "Semiologia" y otras "Estafas" Corporativas - "El señor Ramírez y el Concepto" por Daniel Samper Pizano

 

 

Buenos días, caballeros —dijo el gerente de la revista a los altos empleados reunidos para la ocasión—. Quiero presentarles a Giacomo Coprolalli, presidente de Imagemakers Inc., empresa autora del proyecto de logotipo que nos congrega.

- Logotipo no —corrigió con sonrisa amable Coprolalli, un italiano de barba entrecana, traje azul oscuro y corbata de marca—. Nosotros trabajamos la Imagen Corporativa, no simplemente el logotipo.

- ¿Ah, sí ? ¿Y cuál es la diferencia ? —preguntó el señor Ramírez, tesorero de la revista, que habría necesitado 15 años de sueldo para ganar lo que cobraba Imagemakers Inc. por el proyecto de Creación de Imagen y Posicionamiento Ubicacional.

- El logotipo es un dibujo —explicó Coprolalli ajustando una mirada inteligente—. En cambio, la Imagen Corporativa es un Concepto. Nosotros no vendemos dibujos : vendemos Ideas, Conceptos, Proyecciones Semióticas. Yo soy semiólogo, no pintamonas, amigo.

Todos quedaron impresionados, especialmente Katia, la asistente de Coprolalli, que lo miró con orgullo. Ramírez no. Era el único que no se tragaba las Bonitas Palabras del genio de la semiología.

- En pocos instantes les mostraremos el Resultado de nuestro Proyecto —prosiguió Coprolalli—. Pero antes quiero decirles que sometimos el Concepto a tres brainstorms con nuestros Executive Account Directors y nuestro Creative Board. Para llegar a la propuesta final tuvimos en cuenta la historia de esta revista, su filosofía y la identidad de la marca. Gracias a eso logramos una estupenda Imagen Corporativa Integral, un diseño que permitirá a la revista una nueva visualización plástica y un Comportamiento Estratégico a la altura del mercado.

- ¡Oh ! —exclamaron algunos de los asistentes admirados.

- ¡Ah ! —dijeron otros, sorprendidos.

- Mmhhkk —musitó escéptico Ramírez.

- Katia, por favor —dijo Coprolalli— : sírvase mostrar en la pantalla el Resultado.

Valiéndose de su computador y el programa Power Point, Katia procedió a revelar el proyecto que supuestamente había consumido largas horas de debate y por el que Imagemakers Inc cobraba muchos millones de pesos. El pasmo fue general. No había nada. La pantalla estaba en blanco.

- ¿Podría explicarnos mejor el Resultado ? No veo nada —se atrevió a decir el gerente.

Coprolalli fingió sorprenderse.

- ¿Cómo que no hay nada ? Hay transparencia, amigos. Transparencia sin fondo. Lo primero sugiere la limpieza conceptual de la revista, y lo segundo plantea que somos un medio de comunicación que siempre escudriñará más allá que los demás. Los otros van hasta el fondo. Nuestra revista va más allá, no tiene fondo que la detenga.

Los circunstantes se miraron maravillados.

- ¡Claro ! —dijo con entusiasmo el gerente— : nuestros valores son la transparencia y la superación de los límites. Ahora sí lo entiendo : es genial.

Los demás, al oír al gerente, aprobaron el Resultado con un aplauso. El tesorero Ramírez, sin embargo, no estaba satisfecho.

- De modo que la tal Imagen Corporativa, el Proyecto, el Posicionamiento Ubicacional no son más que una cortina de nada.

- Me temo que usted no ha captado el Concepto —insistió Giacomo—. Quizás lo vea mejor cuando le muestre el diseño de papelería y uniformes, ya incorporado a nuestra Propuesta Gráfica. Katia, por favor.

En ese momento, Katia extrajo sobres y papeles de un maletín.

- Ésta es la nueva papelería distintiva de la revista —dijo solemnemente.

- Pero… me parece que están en blanco —se atrevió Ramírez.

- En blanco no, amigo —corrigió el italiano—. No confunda usted lo blanco y lo transparente. No puede ser blanco, porque carece de fondo. Por eso sólo es transparente. No, usted no ha captado el Concepto. Espero que lo entienda cuando Katia les enseñe los nuevos uniformes.

Katia extrajo de una maleta varios delantales, uniformes y blusones totalmente simples. Blancos todos. Sin letreros, marcas, ni adornos.

- ¡Estupendo ! Aquí veo representado el espíritu combativo de nuestra revista— exclamó el gerente.

- ¡Qué transparencia ! —comentaron en éxtasis los demás (salvo Ramírez).

Coprolalli y Katia aceptaron las felicitaciones y agregaron algo sobre la importancia de Interiorizar el Sentido de la Idea.

- Muchísimas gracias —les dijo el gerente—. El Resultado es extraordinario ; estamos orgullosos y optimistas de nuestra nueva etapa en el mercado. El señor Ramírez les mandará mañana el cheque de sus servicios.

Pero al día siguiente, cuando Katia quiso depositar el pago, descubrió que el cheque que acababa de llegar estaba totalmente en blanco y, además, no tenía fondos.

El señor Ramírez acababa de entender el Concepto.

 

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