A los niños les gustan
los leones las ballenas
creen en los leones
creen en las ballenas
Hay muchas estrellas
para decirlo
en el cielo de África
muchas estrellas
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A los niños no les gusta la muerte
son como todo el mundo
su mundo de barro
son como los leones
como las ballenas
no bonita la muerte
ni mucho menos
la culpa la tiene la vida
no los leones
A los leones
les gusta mucho la vida
A las ballenas también
y a los niños
Hay un sol
para borrar las penas
que ya no existen
en el cielo de África
Mañana la luna
y un árbol centenario
donde duermen
los monos lejanos
-
No a los niños
no les gusta la muerte
¿a quién va a gustar
a quién?
¿No crees en los pájaros
no crees?
pero algo te ha despertado
frio calor
Te sientes a solas
¡que locura esta soledad!
pero sabes muy bién
que no estamos tan solos
Hay alguien detrás de la puerta
hay alguien
o detrás de la ventana
hay alguien
la ventana para la mañana
la ventana
la puerta para la noche
la puerta la puerta
adivina si lo puedes
adivina
¿que nunca
adivinaste nada?
¿a qué te dedicas
si no a morir con los niños
morir con ellos
y crecer con tantas muertes?
¡Juegos de manos
con trés pelotas!
esa es tu razón
¡dos rojas y una blanca!
no te aconsejo esos juegos
- pero soy yo
ahora no se trata
de hacer el malabarista
Puedes hacer punto
o nadar sin flotador
A los niños
no les gusta la muerte
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pero cuidado
con los juegos de manos
no es un buen chisme
para encontrar el sueño
¿porqué les gustarías?
muerte
en el cielo
de África
- no soy
casado
ni con una negra
ni con una puta
suerte
en el
cielo
de la tierra
¿porqué
no nos hemos
casado
con todas las mujeres
a ver si hay
una mujer
que quiera casarse
conmigo
me la compraré
hombre del cielo de África
con el oro de tu sol
y la plata de tu luna
también querría
comprarme un caballo
un caballo
con crines de fuego
y galoparé
en el Patio de los Leones
cantando
canciones de amor
melena y crines
tengo los ojos azules
trazos de cielo arrancados
al cielo de África
Querría caminar
en los cagajones de un rey
y lavar mis pies
en el estiércol de una princesa
Soy tan celoso
y tan bellos son sus blasones
a los niños
no les gusta la muerte
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Querría ayudar a misa
en San Pedro de Roma
y comerme las hostias
enseñando mi corazón a las monjas
Soy tan celoso
y tan bellos son sus techos
- a los niños
no les gusta la muerte
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Querría comerme los pies
de la Presidenta de la República
pero no los comeré
si huelen tan bién como su pecho
Soy tan celoso
y tan bellos sus tambores
- a los niños
no les gusta la muerte
Querría echar mano
de una parte del pastel
y ofrecerla a los pobres
- soy tan celoso
Y tan bellas esas calles
de luz y de limpieza
- a los niños
no les gusta la muerte
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Querría cocinarme
un huevo de paloma
y compartirlo
con la mujer de mi vida
Soy tan celoso de sus encantos
tan celoso
- pero a los niños
no les gusta la muerte
Querría ser
un buen público
No esperar que me pidan
mi opinión
Y hacer el amor
con una comediante
No les gusta la muerte--
a los niños a los niños
Hice el amor
con una panadera
con dos estudiantes
con una leñadora
Con la esposa de un dentista
tenía dos niños
y les pregunté a ver
si les gustaba la muerte
lo hice con la esposa
de un dentista
con la de un arquitecto
y la de un cineasta
con una empleada
de la RATP en Paris
el metro cruzaba
los territorios de nuestro amor
con la mujer de un militar
cuyo grado no me acuerdo
pero este olvido no impidió
que hiciera el amor
Hice el amor con veintitrés putas
menos una puta
que parecía una puta
pero que no lo era
Hice el amor
con una mujer rica
cuyos niños no amaban
a la muerte
a ella sí que le gustaba
el amor que yo le daba
y querría
que siguieramos haciéndolo
pero nada a continuación
nada de nada
porqué me volví impotente
que sí que sí
y era preciso
que llegara a ser pobre
para hacer el amor
de nuevo
llegué a ser tan pobre
los niños son testigos
llegué a ser tan pobre
que estuve a punto de morir
y a mi támpoco
me gusta la muerte
y me nutrí
de la mujer de un médico
de la hija
de este mismo médico
y de su prima
que se llamaba Clara
Clara
tenía un sexo tan bello
que todavía me queda el gusto
en la boca
Te quiero Clara
te quiero te quiero
a los niños
no les gusta la muerte
--
no he olvidado
nada de tus muslos
ni támpoco de tus sueños
de niña ñoña
y si no los quisé
tanto como tu lo quería
era porque yo mismo
era un ñoño
en mi camino de casanova
encontré ochenta y trés niños
y a ninguno
le gustaba la muerte
y a la Gitana negra
con anillos de cobre rojo
la he querido
durante cinco años
cada vez que llegaban
los carros verdes
aún habías crecido
trés centimetros más
y tus senos se habían vuelto
tan gruesos
que no pude resistirme a moldearlos
con yeso
Y no volví a verte
en estas epocas de nieve
cuando el viento
paraba los carros verdes
volviste porque me amabas
pero pero
pero había dejado este mundo
para ir a otro
y te había olvidado
con mucha felicidad
- a los niños
no les gusta la muerte
-----------------
luego me acordé de tí
otro tiempo otra tierra
cuando estaba mirando
los brazos de una Gitana
me acordé de tus piernas
de tu vientre
y pensé ser muy estúpido
pero que más
Había hecho el amor
con una negra
que quería casarse
conmigo
Se preguntaba
a propósito
del color
de sus pieles
si tendrían la piel blanca
o negra
a ella no le gustaba
la piel negra de los africanos
era suya esta piel
de la cabeza a los pies
pero no le gustaba
como me gustaba a mi
y la llené de mi espuma
blanca y negra
pero nada de niños
y nada de blancura
y dejamos de hacer el amor
hasta no querernos
nada de niños
nada de amor nada de muerte
luego estuve de juerga
con la mujer de un burgués
que era banquero
o político o astrólogo
quien podía ser este hombre
cuya mujer
me había comprado
el amor que le daba
tuve
una maravillosa aventura
con dos maestras
de escuela
tenían el mismo nombre
lo que me divertía
no puedo decir
como se acabó
no puedo decirlo
pero ¡que aventura he vivido
con dos maestras
de escuela!
conocí
a una mujer lisiada
había perdido una pierna
en un accidente de moto
tenía un sexo muy bonito
y profundo
y un muñon
acariciador
ha muerto bebiendo giniebra
Rue de Rennes en Paris
en la acera glacial
de diciembre en Paris
ha muerto al aproximarse
la Noche buena
llena de giniebra en la acera glacial
Rue de Rennes
no la quise bastante
no la quise bastante
la quise pero no bastante
eso no fue amor
la querría hoy
si estuviera viva
y bebería giniebra con ella
para morirme también
en la acera glacial
cerca de la torre de luz
cuya sombra debe ser
la Rue de Rennes
me avergüenzo
por no haberla querido
como lo merecía
su alma de borracha
quizás era la mujer de mi vida
quizás
quizás no existió jamás
la rue de Rennes
No he querido bastante
ese es el problema
No he querido bastante
ese es el problema
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pero a los niños
no les gusta la muerte
y pensaba en África
en sus enfermedades
Había querido a las pastoras
las camareras
las barrenderas del metro
las vendedoras de buñuelos
las vendedoras de encantos
rue de Quincampoix
las mujeres de pescadores
en Ondarribia
Falta tanto amor
a mi amor
y tengo tanto miedo
de morirme a solas
Quiero que estés aquí
cuando me muera
estaré en mi cama
delgado y pálido
no moriré en una guerra
entre hombres
como lo dijo
esa estúpida adivina
y cogeré tu mano
acariciadora de sueños
y la estrecharé
junto a mi corazón
no pensaré en mi sexo
no tendré un sexo
pensaré en tu sexo
acariciador de sueños
pero
no me lo enseñarás
a un moribundo
no se le enseña el sexo
pero inclinándote
para besarme la boca
me enseñarás tus senos
de blancura y de sombra
me los enseñarás
de blanco y de negro
dibujando la luz y la sombra
en mis ojos
y sabré
como última certidumbre
sabré del amor
que los infla
y tendré ganas de
besarlos
no pensaré en besar
tu sexo
como siempre
lo he hecho
para pedirte el amor
que me debes
y para darte
las gracias
por quererme
con tanto placer
pero no diré nada
no abrirás tu falda
no tocaré la punta
de tus senos
Cerraré los ojos
y te estrecharé la mano
y te diré:
cariño te mentí siempre te mentí
y te levantarás
y me mirarás
perdonándome
mis mentiras
tu también me mentiste
y te perdono
pero miraré tus senos
con terror
y mirarás mi terror de hombre
que va a morir
y gritaré:
te mentí te mentí
y me dirás
que no es tan grave
pensarás
que es por culpa del delirio
al aproximarse
la muerte
el delirio
alivia el dolor
pero mi terror
se quedará intacto
mi espíritu
medido
solo mi alma
hará una mancha de sombra
entre las sombras
de tus senos blancos
una mancha
que jamás borrarás
no quiero
que la borres
son los senos
que siempre acaricié
ya no tengo
ni sexo ni deseo ni placer
nada para hacer
el amor contigo
nada vivo
en mi pensamiento
te mentí te mentí
cariño
te mentí
toda la vida
y no me creerás
no me creerás
no te importará
esta mentira
quieres acordarte
del amor
quieres guardar
esta memoría
y en un último
suspiro
te gritaré
la verdad de mi vida
y
la mentira
de la tuya:
- ¡jamás te quisé!
Jamás te quisé
¡que verdad! ¡que muerte!
- a los niños
no les gusta la muerte
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Corre, no... vuela...
no, lárgate
lárgate
para viajar
hay muchos viajes
para los pájaros
no podemos correr
en los aires
quién volaría...
los pájaros, no
lárgate...
que nunca te veamos más
que el barco te lleve
a lo largo de su arboladura
lárgate dulce
pájaro del mar
tengo tantas ganas de amar
a la que quiero
pero quererla como queremos
cuando queremos de verdad
¡lárgate!
y ¡no trates de entender!
la mar
támpoco te entiende
tacha los barcos negros
que recortamos
en el papel
del diario
¡lárgate! ¡lárgate!
¡bello pájaro!
¡buen agüero!
que los puertos te alcancen
¡que las viudas
de los marineros
te vistan
de verde!
el verde
es el color del tiempo -
no se recupera
el tiempo
a los niños
no les gusta la muerte
